La sonrisa perfecta. Trigésimo relato.

La sonrisa perfecta 

Te vi, estaba cerca, pero aún alejado de ti, de pronto algo llamó mi atención, me atrajo hacia ti, no imaginé cuán fuerte sería esa atracción. Quedé fascinado, miraba cada detalle de ti tratando de buscar algo más que me fascinara de igual o mayor forma, todo en ti era perfecto; sin embargo, ninguno de esos detalles pudo provocar en mí tal encanto como aquella sonrisa, fue en ese momento que me di cuenta de que en ti estaba la sonrisa perfecta que me había robado el corazón, desde aquel momento supe que no podía permitirme que aquella sonrisa se desvaneciera.



Créditos: Bernardo Jared.
Adaptación: Doctor Suavecito.

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